El mortal Triángulo de las Bermudas

Uno de los temas que por siempre ha llamado la atención, sin duda alguna es el indescifrable enigma que ha rodeado al Triángulo de las Bermudas, las desapariciones sin dejar rastro no deja de impresionarnos, complejo de por sí, y lleno de interrogantes.

En este espacio expondremos escuetamente datos, testimonios e investigaciones, referente a estos oscuros sucesos. Les invitamos a un viaje al desconocido mundo de lo inexplicable.

El Triángulo de las Bermudas, también conocido como El Triángulo del Diablo y el Limbo de los Perdidos, es un conjunto de líneas aparentes formando una figura geométrica (triángulo), situada entre las Islas Bermudas, Puerto Rico y La Florida. Su área geográfica es de 3.900.000 kilómetros cuadrados. En la peligrosa zona han ocurrido inmensas desapariciones que de ninguna manera han sido resueltas. Lo que acontece en esa parte del océano Atlántico occidental es intrigante, durante los últimos 70 años han desaparecido más de 200 aviones, cuantiosos barcos, pequeñas embarcaciones e incalculables historias jamás contadas, sin dejar ningún rastro de lo que pudo ser de ellos, ya que nunca se han encontrado restos ni sobrevivientes.

El caso más famoso es el vuelo 19, cinco bombarderos estadounidense, tipo torpedo abandonaron Fort Lauderdale, el 5 de diciembre de 1945, en un vuelo de entrenamiento rutinario, con buenas condiciones meteorológicas. Ninguno de ellos regresó, incluso el hidroavión que se envió en su búsqueda, desapareció. En este vídeo podrán ver brevemente la historia de lo sucedido con dicho vuelo:

Al día de hoy no hay una explicación que efectivamente compruebe lo que sucede en esa zona, lo que si se sabe son las diferentes e inquietantes explicaciones que dan los escritores investigativos y de ficción; tales como extraterrestres, agujeros submarinos, portal a otras dimensiones, corrientes devastadoras debajo de la superficie del mar, o una de las teorías más aceptadas es la que en el fondo de esta franja del mar existen grandes cantidades de gas metano (hidrocarburo gaseoso incoloro originado por la descomposición de sustancias orgánicas, componente del gas natural) almacenado mayormente en aguas congeladas, donde los científicos han determinado que la existencia del gas puede producir hundimiento de barcos y aviones según la atmósfera que produce la ebullición.

Un antecedente de lo anterior ocurrió cuando el vuelo boing 707 cuya trayectoria de viaje era de San Juan de Puerto Rico a New York (1963), había alcanzado los 30.000 pies, se observó un fenómeno extraño debajo del reactor del avión; una burbuja se formó en medio del Atlántico, aproximadamente de una milla de ancho, los investigadores del hecho concluyeron que si la burbuja fuese lo suficientemente grande y poseyera una alta densidad, alcanzaría también el espacio aéreo, atrapando aviones en su extensión de influencia.

Hay especulaciones que la zona está situada encima de un remolino, un agujero en el océano y que parte de la Atlántida se encuentra debajo del Triángulo. Las explicaciones son variadas, no se ha comprobado con absoluta certeza lo que allí sucede.

A continuación un testimonio verídico de unos conocidos, quienes protagonizaron un aterrador incidente el cual cambio sus vidas invariablemente:
"Me encontraba con un grupo de amigos, corría el mes de septiembre del 2011, aproximadamente las 10:00 AM, decidimos dar un paseo desde el puerto turístico del viejo San Juan (Puerto Rico), salimos rumbo a mar abierto, conversábamos plácidamente cuando de repente, los motores del bote dejaron de funcionar y súbitamente vimos como el mar se abría ante nuestros incrédulos ojos, el cielo se ennegreció con un tono amarillento, es un tanto de lo poco que puedo recordar, la embarcación se levantó en forma vertical, quedando yo en la parte más alta de la lancha, dándome una vista superior de todo lo acontecido,  descubriendo un oscuro abismo ante nosotros, donde no fluían las aguas, el tiempo en ese instante se dilató. me percaté de la cara de terror de mis compañeros. Abruptamente todo volvió a la normalidad, un silencio sepulcral reinaba entre nosotros, siendo lo sucedido inexplicable, después solo nos persignamos dando gracias por estar vivos".

Ciertamente este tema es indiscutiblemente fascinante e interesante, es un lugar real pero desconocido, ya que los fenómenos y desapariciones allí ocurridas hasta el presente no tienen explicación científica que sustente este increíble enigma.

Un sobreviviente al Triángulo nos cuenta su hazaña en el siguiente podcast:

"Según vamos adquiriendo conocimientos, las cosas no se hacen más comprensibles, sino más misteriosas". Albert Schweitzer.